La misión de la educación en los niños y jóvenes recae, fundamentalmente, sobre dos pilares importantes: la familia y los docentes. Este último grupo desempeña no solo labores educativas, sino una función primordial en la vida de todos y cada uno de los menores. ¿Y por qué es tan importante el papel del docente en los niños? Hoy queremos poner en alza el esfuerzo que hacen todos los profesionales de la educación y su importancia en la etapa evolutiva de todas las personas.
¿Cuál es el papel del docente en los niños?
Es evidente que las familias son una parte esencial de la educación de los niños. Sin embargo, los docentes cumplen con una misión imprescindible en estos estudiantes, ya que su labor no sólo está centrada en transmitir conocimientos académicos, sino en ser un modelo de actitudes personales y emocionales.
Hay que reconocer que el papel del docente en los niños va más allá del ámbito académico y trasciende al área más personal y social. ¿Y por qué?Porque permanecer grandes periodos de tiempo en el aula, interactuando con los estudiantes, les permite extraer mucha información valiosa para potenciar el desarrollo integral de estos niños. Esto es clave para la construcción y la potenciación del talento que cada niño posee dentro.
Funciones que desarrolla un docente en los niños
El docente es capaz de realizar numerosas funciones en los jóvenes y a continuación subrayamos algunas de las más importantes:
- Inspirar, motivar, desarrollar la creatividad
- Guía para el descubrimiento de valores, como la independencia, el respeto, la tolerancia o la igualdad
- Creador de ambientes idóneos para el desarrollo del talento, la creatividad y todo tipo de habilidades
- Potenciación de la confianza y la seguridad en los alumnos
- Portador y receptor de todo tipo de información sobre los niños: educación, sentimientos, gustos, vivencias y sueños
- Organización y puesta en práctica de actividades
- Fomento del espíritu crítico
Conclusión
En estos tiempos tan difíciles que estamos atravesando como consecuencia de la irrupción de la crisis sanitaria del coronavirus no deberíamos olvidar el importante papel del docente en los niños y su desarrollo como agente socializador. A través de la docencia, muchos profesionales transmite valores que pronto -o en un futuro- se verán reflejados de manera directa o indirecta en esos niños.
Ahora más que nunca deberíamos plantearnos la relevancia que adquiere el profesorado y su responsabilidad en el desarrollo emocional y social de los jóvenes.
En Grupo Musarte creemos en la educación del siglo XXI, un modelo que exige la implicación absoluta de toda la comunidad educativa y que es crucial en el contexto actual en el que nos encontramos. La complejidad social y la globalización cultural requieren personas con capacidad para asumir los nuevos retos del siglo.
A través del aprendizaje, muy en particular de la enseñanza en los niños, podemos no solo transmitir conocimientos, sino liderar e inspirar el desarrollo integral de las personas.
